Sonrisas desconocidas bajo ceños fruncidos,
planes inesperados con amigos de otros pueblos,
reuniones familiares sin miedo por los abuelos,
aviones que me llevan a viajar con mis hermanos,
maletas de una vida cambiante de nómada constante,
los instantes pospuestos, retrasados, perdidos
por una pausa desafiante,
descubriendo nuestras almas, tapando nuestras bocas
todas
tan llenas de aire.
No hay comentarios:
Publicar un comentario